Con una alimentación restringida, los jóvenes animales en crecimiento deberían comer dos veces al día como mínimo, pero solo una vez al día si se trata de ejemplares maduros, ya que para adquirir una sensación de saciedad y, por consiguiente, reducir la agresividad, es importante que el volumen de la comida sea el adecuado.
With restricted feeding practices, young growing animals should be fed at least twice daily, whereas mature animals should be fed once daily, as an adequate meal size is important for the animal to reach satiety, and will minimise aggression.